CERCAS ELECTRICAS

Cuando las alarmas y las rejas ya no son suficientes para la protección, la cerca eléctrica suele ser una excelente alternativa. La descarga que se emite es de alto voltaje pero de corta duración, por lo que no hace peligrar la vida de las personas, más allá del fuerte impacto que genera.

La creciente ola de robos y copamientos sobre todo en las ciudades, ha hecho que las personas procuren otro tipo de medidas de seguridad para sentirse más seguros en sus hogares.

Sumado a las alarmas y las rejas, la cerca eléctrica es una buena alternativa para la protección de la casa, ya que impide el ingreso de los ladrones al predio por medio de un sistema de cerca electrificada que realiza una descarga inmediata de electricidad al ser tocada.

En las ciudades, este sistema de seguridad se expandió rápidamente tanto para casas, como edificios, barrios privados, condominios, empresas, fábricas, etc.

La cerca eléctrica básicamente es un sistema de cercado que funciona con un sistema de electricidad de alto voltaje pero de corta duración, lo que efectúa una fuerte descarga en la que no peligra la vida de quien la toque, pero que impide que se pueda agarrar para treparse.

La gran mayoría se encuentran conectadas con un sistema de alarma, por lo que al cortarse la electricidad de la cerca porque alguien hizo contacto con ella, directamente se activa la alarma.

Los sitios donde se tiene instalada la cerca eléctrica están claramente identificados con carteles de seguridad que así lo indican, por lo que se genera además un enrome efecto persuasivo en el intruso que pretende ingresar.

Más allá de la electricidad, la cerca eléctrica genera un fuerte efecto psicológico que hace que el ladrón prefiera ni siquiera intentar ingresar en los predios protegidos por este sistema.

La cerca eléctrica y la energía

Los cables de la cerca eléctrica generan una descarga eléctrica aproximada entre 7.000 y 11.500 voltios con bajo amperaje.

Estos cercos de protección cuentan además con una batería (su tamaño depende del metraje del cercado) que brinda una autonomía y generación de electricidad en los casos que hay cortes, para así poder funcionar independientemente de la falta de energía durante 24 horas.

Se generaron muchos debates en torno a este método de seguridad, pero está demostrado que no hace peligrar la vida de las personas más allá de la fuerte descarga de electricidad, por lo que su instalación es totalmente legal en todas partes del mundo.

Las fuentes de energía que utilizan son las de las instalaciones eléctricas tradicionales y no generan un consumo de electricidad demasiado importante, es comparable con el de una bombilla de 40W que se encuentre constantemente encendida

En un principio eran usadas para el cercado de los campos, evitando de este modo que los animales se escapen del terreno, siendo mucho más eficaces que un cercado tradicional ya que el animal tiene el recuerdo de lo que le sucedió al acercarse a esa cerca electrificada y evita que le suceda nuevamente.